Impulsa tu aventura con sabores locales
Después de explorar las históricas salas del Castillo de Bran, querrás una comida a la altura de la audaz historia y la belleza natural de la región. El pueblo de Bran y sus alrededores rebosan de restaurantes que sirven de todo, desde comida rústica rumana hasta platos internacionales con un toque montañés. Comer cerca te ahorra tiempo de viaje, por lo que puedes entretenerte degustando sarmale (rollos de col) o sorbiendo infusiones mientras contemplas el resplandor de las estribaciones de los Cárpatos al atardecer.
Los chefs locales se abastecen de ingredientes procedentes de granjas familiares: queso cremoso de oveja, setas silvestres buscadas en los bosques cercanos y miel de los colmenares del pueblo. Tanto si te apetece un humeante tazón de ciorbă (sopa agria) después de un tour matutino frío como si prefieres una ligera ensalada de verduras en una tarde cálida, encontrarás platos auténticos de gran calidad que equilibran la tradición con una fresca creatividad. Muchos restaurantes ofrecen también opciones vegetarianas y sin gluten, para que todos los viajeros encuentren algo delicioso.
Desde acogedoras tabernas con música folclórica en directo hasta elegantes cafeterías, perfectas para tomar un café y un dulce rápido, el panorama gastronómico de la zona de Bran satisface todos los apetitos y presupuestos. Sigue leyendo para conocer nuestras mejores opciones, consejos prácticos y respuestas a tus preguntas sobre restaurantes, para que puedas planificar comidas que te hagan la boca agua junto con tu visita al castillo.